La curiosa ciudad de Hoi An

Día 105

Hoi An

¡Menudo viajecito! Toda la puta noche, y no paraban de meter gente en el bus. Los blanquitos en las camitas, incomodísimas y pequeñas, y los locales (pagando menos) en el puto suelo. Sobre las 7:00 de la mañana llegamos a Hoi An, la ciudad de los sastres por excelencia. Yo llegaba sin dormir nada de nada, pero Elena encontró un buen asiento y se tiró todo el viaje sobada.

A diferencia de Tailandia, el bus aquí te deja en los mejores hoteles, relación calidad-precio, por lo que nos quedamos directamente donde nos dejó, previo regateo, por supuesto. Nos dimos una duchita, fuimos a desayunar y empezamos un largo día de turismo por la curiosa y bonita ciudad de Hoi An.

En esta ciudad lo tienen muy bien montado: te vas a la oficina de turismo, te venden un ticket que incluye la entrada para las principales atracciones (básicamente templos) a precio simbólico, te dan un mapa, y te lanzas a andar por la ciudad: así de fácil.

Así empezamos la ruta por los templos de Hoi An.











Viendo un montón de sastrerías, donde hacen ropa a medida a precios muy interesantes. Hay que tener tiempo, unos 2-4 días, algo de dinero y espacio para llevarte las cosas. Nosotros no cumplíamos los requisitos, así que ni siquiera nos dejamos medir. Pero es muy interesante de ver, ya nos lo dijeron Eva y Aníbal.



Las chicas quisieron probar el método de depilación tradicional, que también se puede ver en Tailandia. Básicamente, las mujeres que trabajan ahí tienen unos hilos que van cruzando con las manos muy rápido y van cortando/arrancando los pelos. Tampoco es que sea especialmente barato, pero bueno, es curioso.




Un templo más y llegamos al río.




Antes de hacer la segunda parte del tour, paramos para comer. Belén se fue a la playa, porque ella tenía menos tiempo y se iba el día siguiente hacia la siguiente parada, Hue, la zona desmilitarizada, la mitad entre Vietnam del Norte y del Sur. Nosotros teníamos un día más en Hoi An. De alguna manera, tenemos la sensación que vamos más lento que todas las personas que vamos encontrando por el camino.


Nos tocaba ir al Puente Japonés y caminar alrededor.


Muy bonito, la verdad.



Curioso de ver lo duro que trabajan los que llevan las bicis :DD


Después cruzamos el puente que está sobre el río para ver las primeras decoraciones del Año Nuevo. En Hoi An estaban montando un concierto y preparando unas figuras flotantes que simbolizaban los animales del horóscopo chino. El primero, el dragón (este es el mío :P). Después, el tigre, porque el nuevo año será el del tigre. Además, colocan una diferente al resto de sitios, es la del pez, una forma de agradecer al río la comida. De esto nos enteramos porque le preguntamos a una chica que hablaba inglés y que trabajaba en un bar.




En este bar aprovechamos para ver la puesta de sol y tomarnos una cervecilla.






Regresamos al hotel para recoger a Belén e ir a cenar. Estaba ya todo casi preparado para el nuevo año. Todo muy colorido y con muchas luces.



Tras la cena, volvimos a nuestro hotel, donde teníamos piscina, que no usamos, para acabarnos la última antes de despedirnos de Belén e irnos a sobar.


Control de Gastos:
- Desayuno: 50000 VND (1,96 €)
- Depilación: 220000 VND (8,62 €)
- Imanes: 35000 VND (1,37 €)
- Turismo: 90000 VND (3,53 €)
- Servilletas: 30000 VND (1,18 €)
- Comida: 145000 VND (5,68 €)
- Bebidas: 138000 VND (5,41 €)
- Cena: 200000 VND (7,84 €)
- Hotel: 195000 VND (7,64 €)