De compras por Ao-Nang

Día 77

Ao-Nang (Krabi)

Ya nos han dejado los chicos, se nos ha ido Andreea, así que vamos a disfrutar unos días de relax total. Teníamos todo el día en Ao-Nang, y muy poquito que hacer.


Lo primero fue ver el amanecer, y luego volvimos a la camita.



Cuando, finalmente, nos despertamos, fuimos a desayunar/comer, a nuestro sitio, y seguimos caminando por el pueblo, viendo las tiendas, aguantando los pesados que ofrecen masajes, tuk-tuk y trajes, pero muy relajaditos.

Después, fuimos a un café que tiene Internet wifi gratis si consumes. Se llama Tattoo de Café y es cafetería-restaurante y centro de tatuajes (para el que le interese, la contraseña de acceso es “08061058fd”).


Nos tomamos un cafetito mientras leíamos el correo y buscábamos tickets para nuestros próximo destinos. El que estaba muy barato es el de Barcelona – Hong Kong para Abril, y empezamos a hacer cábalas, porque en la segunda parte del viaje, además de uno de nuestros hijos pequeños, Luciano, nos acompañará el mayor, Serafín, alias ‘mekagoennacona’.

Y empezamos a mirar cositas para comprar, porque teníamos que cambiar el vestuario, estamos en todas las fotos con la misma ropa, jeje. Y, a veces, vale más la pena comprar y tirar, que lavar lo que tenemos.

No compramos casi nada, pero nos hicimos fotillos divertidas. Aquí Elena con una camiseta de Pepsi.


Yo con mi Chang.


Gafas Rayban originales.


Un gorro peculiar.


Y una cervecita en un bar con un nombre curioso :DD


Que no me olvide de la tienda “oficial” Armani. Como veis, en Tailandia, las leyes son bastante suaves, jeje.


Volvimos a darnos otra duchita, porque era un día bastante caluroso, y comprar el billete para Bangkok el día siguiente, en autobús, algo como 13 horas. Antes de llegar a la ducha, recogimos la ropa de la lavandería, que nos habían cobrado de más, porque no pedimos planchado, pero nos lo dejaron planchado. Era una pequeña estafa de 1 eurillo, que no es dinero, pero en Tailandia es SIEMPRE así. El turista blanquito, cacho de carne con ojos y con dinero en la cartera es un simple objetivo de todas sus corredurías y estafas, además de su triste y pésimo servicio. Esta vez, Elena entró en cólera, y ahí tuvimos una charleta, digamos, interesante :P

Después nos duchamos y salimos a ver la preciosa puesta de sol.


Al acabar, a buscar restaurante para cenar. Encontramos otro muy acogedor en una calle, en el que cenamos muy bien e incluso más barato que otros días. Allí conocimos una familia de Suecia, con los críos pequeños, con los intercambiamos impresiones.

Para cerrar el día, nos fuimos a tomar una cerve al paseo marítimo, cerca del mar, en un banco, en plan romanticón y nos volvimos a dormir.

Control de Gastos:
- Desayuno: 250 THB (5,21 €)
- Comida: 270 THB (5,63 €)
- Lavandería: 180 THB (3,75 €)
- Hotel: 600 THB (12,50 €)
- Cena: 260 THB (5,42 €)
- Bebidas: 210 THB (4,38 €)
- Billetes a Bangkok: 900 THB (18,75 €)